Casi todos conocemos el micro cemento, pero hoy os vamos a hablar de los pavimentos de resina epoxy, menos conocido.
Partimos de la base que son unos productos bi componentes, que al mezclarlos hacen una reacción química en la que se calienta el producto mezclado y empieza a endurecerse, por lo que hay que extenderlos inmediatamente sobre la superficie a aplicar para poder manejarlo.
Previamente hay que limpiar el pavimento sobre el que se va a extender el producto con una hidro limpiadora de agua a presión o con una lijadora, corrigiendo las posibles imperfecciones que podamos tener. Dependiendo de donde se vaya a aplicar utilizaremos una cosa u otra; por ejemplo para un garaje, una nave industrial, para una vivienda, etc
Después de realizar este trabajo aspiraremos la superficie y estaremos en condiciones de empezar a realizar el trabajo.
Estos pavimentos o suelo de resina epoxy, son suelos auto nivelantes y de espesor muy fino, que no van a cubrir las imperfecciones que tenga el pavimento. Dependiendo de esto se regularizará la superficie y acto seguido comenzaremos con la aplicación.
Son pavimentos que llevan varias capas de resina y proyecciones de árido cuya proporción nos dará el grado de rugosidad deseado.
Obtendremos un acabado liso, contínuo, sin juntas, higiénico y con mucha facilidad para limpiarlo. Es como si aplicáramos una pintura y en todos los colores de la carta RAL y en diferentes acabados; brillo, satinado y mate.
Es un material impermeable y resistente a la abrasión.
Se puede realizar en viviendas sobre pavimentos de terrazo, cerámica, granito,… y reformar la cocina o el baño sin tener que quitar el pavimento existente, o para arreglar un garaje en el que está el pavimento agrietado o en mal estado.
Es fácil y se realiza de manera rápida.
Una vez realizado el trabajo se le debe de aplicar un recubrimiento protector para que le de más durabilidad.
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